Apertura de Curso en la Rl. Ac. Alfonso X el Sabio
En el salón de actos de la Real Academia Alfonso X el Sabio, de Murcia, ha tenido lugar esta tarde a las 19:30, el solemne acto de apertura del Curso Académico 2011-2012, con asistencia de conocidas personalidades del mundo cultural y político, y entre ellas una representación del Ayuntamiento de Cartagena, de la que es Archivero don Cayetano Tornel, presidida por doña María del Rosario Montero Rodríguez, Tercer Teniente de Alcalde, y Concejala del Área de Cultura, Patrimonio Arqueológico, Educación, Mujer, Festejos y Deportes.
En primer lugar, por el Secretario General de la RAAX el Sabio se dio lectura a la Memoria del Curso académico 2010-2011, con la relación de actos y cursos realizados, publicaciones que se han editado en dicho año, hasta alcanzar un total de más de 700 obras; el fallecimiento de los académicos de número señores Barceló Jiménez y Mas García, y otro de los correspondientes; y el nombramiento de tres académicos correspondientes.
Seguidamente, el Académico de Número, don Cayetano Tornel Cobacho, pronunció el discurso inaugural del Curso 2011-2012, titulado “Internet, los archivos y la escritura de la historia”. En su brillante y valiosa intervención, puso de manifiesto las diversas tendencias y tecnologías que se han desarrollado en los últimos tiempos, y la problemática que genera el cambio frecuente de software y hardware; hasta el punto de que la memoria histórica digitalizada pueda perderse, tanto por el deterioro de los soportes que la contienen, como por no poder encontrar en el futuro medios con que leer dichos soportes. Al término de su intervención, que fue muy aplaudida, se repartió entre los presentes el texto íntegro del citado discurso, en un folleto de 24 páginas.
Tras él intervino el Director de la Real Academia, don Francisco Calvo García-Tornel, que en primer lugar dedicó un cariñoso y afectuoso recuerdo a los académicos recientemente fallecidos. También destacó las realizaciones de la Real Academia, pese a las dificultades de orden económico que está padeciendo. Por lo que agradeció las diversas ayudas y colaboraciones recibidas de distintos estamentos.
Hizo una semblanza del origen de las Academias, para solventar las carencias que tenían las universidades, y dijo que cada una de dichas academias recogía o debía recoger a personalidades que estuviesen dentro de sus respectivos campos de trabajo.
Finalmente, dado que dos de los nuevos Académicos Correspondientes residen lejos de Murcia, y no habían podido asistir, entregó el título acreditativo y el distintivo de solapa, a don Ángel Martínez Martínez, único que estaba presente.
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