Miguel Ángel Cárceles, nuevo Administrador Apostólico

En la mañana de ayer recibimos gozoso la noticia del nombramiento de nuevo Administrador Apostólico de la Diócesis de Cartagena, efectuado por Su Santidad el Papa Benedicto XVI en la persona de nuestro querido amigo Miguel Ángel Cárceles Cárceles, hasta ahora Vicario General de la Diócesis de Cartagena.

Conozco a Miguel Ángel desde el año 1972, pues su padre residió hasta su fallecimiento en una de las viviendas del mismo edificio donde yo residía en el Barrio del Carmen, y con frecuencia mi suegro conversaba con él. Por entonces ya era sacerdote, pues se había ordenado en 1962, cuando contaba con 25 años de edad. Es muy aficionado a la lectura, y él mismo ha escrito un buen número de libros.

Iglesia parroquial de Churra.Ha ejercido diversos cargos de importancia, entre ellos el de párroco en la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, de Churra; de la que me ha comentado algunas veces los gratos recuerdos que conserva de su estancia en dicho pueblo. Por la manera en que me hablaba de aquel templo, tenía interés desde que me posesioné en mi nueva residencia de visitarlo, y aunque ya había estado viéndolo por fuera en varias ocasiones, por estar cerrado no pude hacerlo hasta el pasado domingo día 26 de abril. Precisamente al día siguiente de que recibiese la carta con su nuevo destino, y un día antes de que la hiciese pública.

Miguel Ángel con Mari Carmen, mi esposa.Hace unos meses tuve la fortuna de asistir con él a la peregrinación que con amigos de Sucina realizamos a Monserrat, Lourdes, Torre Ciudad y Zaragoza, durante cuyos días pude conocerlo mucho mejor. También hemos conversado con frecuencia sobre el tema de la creación de una nueva parroquia cerca de donde ahora vivo, para cuyo logro ya se cuenta con un solar junto al aparcamiento de Carrefour Zaraiche.

Varias veces nos hemos ocupado de él en Mirador de Alguazas, siendo la más reciente con ocasión de su toma de posesión como canónigo de la S.I.C. de Murcia, junto con nuestro ex-párroco Jesús Belmonte Rubio.

Le deseamos toda clase de éxitos en el desempeño de su cargo como Administrador Apostólico de la Diócesis de Cartagena, cosa que estamos seguros llevará a buen puerto dada su valía personal y dotes humanas.