Los falsos e interesados historiadores

Buscando cierta información de una parienta de Alguazas, he localizado esta mañana un trabajillo del ex Senador cartagenero Antonio Martínez Ovejero, titulado «PELIGROSOS E INDESEABLES PARA LA CAUSA NACIONAL. Aproximación a la represión franquista en la Región de Murcia, en el 70 aniversario del final de la Guerra Civil».

El citado señor, de dilatada militancia en sindicatos y partidos de la izquierda murciana, escribe en un momento del artículo: “A los supervivientes de las palizas se les instruía un nuevo sumario, se les condenaba a muerte y se les fusilaba. Como les ocurrió a Rafael Dólera Bermúdez y Antonio Egea Franco, ambos jornaleros de Alguazas, de 30 y 35 años, afiliados a la UGT. Tras su evasión y captura, fueron condenados a muerte y fusilados.” Y se queda tan pancho.

Debería escribir, pues supongo que lo sabe, que en numerosas ocasiones, tales condenas no tuvieron cumplido efecto. Recuerdo yo muy bien, en los años de mi niñez, al citado Rafael, viviendo en Alguazas, muy cerca del Molino de Abajo, al amparo del hogar de Juan, su hermano mayor, y de su buena esposa Francisca María de la Salceda Barquero Sarabia, conocida popularmente por Paca “la Virgen”. Pues aunque casó y tuvo numerosa prole, parece ser que no le agradó la vida familiar y las obligaciones que la condición de esposo y padre llevan aparejadas.

Es decir, por si no me he explicado bien: Rafael Dólera Bermúdez, pese a contar con una buena hoja de servicios a su espalda, nunca fue fusilado, y pronto estuvo de nuevo en su pueblo; pero parece ser que a algunos les interesa mantener todo lo contrario.