Noche de "los Mayos"
La pasada noche, Murcia, como muchos otros lugares, vivió la tradicional y ancestral costumbre de "los Mayos". En numerosos lugares e iglesias, diversas cruces fueron adornadas de flor natural, y ante ellas casi todas las peñas huertanas y grupos folclóricos cantaron siguiendo la tradición.
A la puerta de la iglesia
Venimos con gran contento,
Sea bendito y alabado
El Santísimo Sacramento.
Con la licencia de Dios
Y la del Señor alcalde,
Le venimos a obsequiar
Al Redentor y a su madre.
Si Cristo nos da su gracia
A la Virgen del Rosario,
Y al divino San José
Le cantaremos el Mayo.
Es costumbre hacer un recorrido por diversas cruces y cantar ante cada una. Nosotros también lo hicimos así, empezando por la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, donde por cierto se adelantaron una hora al horario previsto y tradicional, con el consiguiente disgusto de numerosas personas que llegaron "tarde".
Después estuvimos ante la Virgen de los Peligros, en el Puente Viejo, donde una brisa fresca no impedía que un grupo numeroso escuchase la actuación; para continuar por la Plaza de la Cruz, con mucha gente y concurrencia de grupos; San Bartolomé, etc.
Las peñas se sucedían tocando ante las floridas cruces, y en ocasiones había cola de ellas esperando su turno. Como es costumbre también, todos los presentes eran obsequiados con buñuelos y mistela, aunque también observamos que se repartían bizcochos y otros comestibles.
En Guadalupe de Maciascoque tampoco se perdió la tradición, y tras comenzar el recorrido en la Iglesia parroquial, luego lo continuaron por las diversas casas que tenían colocada una cruz. Durante toda la noche, los vecinos/as del pueblo obsequiaron a todos los asistentes con dulces. La cuadrilla del lugar interpretó los sonidos tradicionales de la tierra y se bailaron jotas, malagueñas y pasodobles, hasta bien entrada la noche.
En Patiño, la antigua Ermita de Patiño, el grupo de animeros también cumplió con su cometido, e incluso este año sacaron en procesión a la Virgen del Rosario. Emilio del Carmelo Tomás Loba, nuestro buen amigo, está logrando que dicho grupo alcance cotas muy altas de buen hacer, recuperando y potenciando costumbres ya casi perdidas.
En las imágenes, algunas de las cruces, y diversas peñas de las que nos deleitaron con su música y cantos.
Venimos con gran contento,
Sea bendito y alabado
El Santísimo Sacramento.
Con la licencia de Dios
Y la del Señor alcalde,
Le venimos a obsequiar
Al Redentor y a su madre.
Si Cristo nos da su gracia
A la Virgen del Rosario,
Y al divino San José
Le cantaremos el Mayo.
Es costumbre hacer un recorrido por diversas cruces y cantar ante cada una. Nosotros también lo hicimos así, empezando por la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, donde por cierto se adelantaron una hora al horario previsto y tradicional, con el consiguiente disgusto de numerosas personas que llegaron "tarde".
Después estuvimos ante la Virgen de los Peligros, en el Puente Viejo, donde una brisa fresca no impedía que un grupo numeroso escuchase la actuación; para continuar por la Plaza de la Cruz, con mucha gente y concurrencia de grupos; San Bartolomé, etc.
Las peñas se sucedían tocando ante las floridas cruces, y en ocasiones había cola de ellas esperando su turno. Como es costumbre también, todos los presentes eran obsequiados con buñuelos y mistela, aunque también observamos que se repartían bizcochos y otros comestibles.
En Guadalupe de Maciascoque tampoco se perdió la tradición, y tras comenzar el recorrido en la Iglesia parroquial, luego lo continuaron por las diversas casas que tenían colocada una cruz. Durante toda la noche, los vecinos/as del pueblo obsequiaron a todos los asistentes con dulces. La cuadrilla del lugar interpretó los sonidos tradicionales de la tierra y se bailaron jotas, malagueñas y pasodobles, hasta bien entrada la noche.
En Patiño, la antigua Ermita de Patiño, el grupo de animeros también cumplió con su cometido, e incluso este año sacaron en procesión a la Virgen del Rosario. Emilio del Carmelo Tomás Loba, nuestro buen amigo, está logrando que dicho grupo alcance cotas muy altas de buen hacer, recuperando y potenciando costumbres ya casi perdidas.
En las imágenes, algunas de las cruces, y diversas peñas de las que nos deleitaron con su música y cantos.
Etiquetas: Murcia
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